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El fuerte crecimiento del e-commerce en los últimos tiempos, el cambio en los hábitos de los consumidores, la creciente apuesta por la sostenibilidad o la irrupción de nuevas e interesantes tecnologías han propiciado que se siga avanzando en la apuesta por la optimización de procesos y de la cadena de suministro, una mejor atención al cliente y un servicio óptimo que cumpla con todos los requerimientos tanto de las marcas como de los compradores finales.
Es por ello necesario conocer cuáles serán las tendencias que más van a destacar este 2023 en los retailers y las marcas, que permitirán a la industria afrontar el escenario futuro que se presenta, donde volverán a imperar aspectos como el desabastecimiento, el coste de la energía o la subida de los carburantes, entre otros. De hecho, según Forrester, el enfoque de los negocios debe estar alineado con la tecnología y con una mayor eficiencia de su logística, cuyo potencial va a ayudarles a generar una apuesta más atractiva y una mayor fidelización de sus clientes. Logisfashion recopila en un análisis publicado en su web estas tendencias:
Durante los últimos meses, esta idea se ha ido fraguando en muchas e importantes marcas de todos los sectores. El impacto de la logística inversa para la cuenta de resultados es insostenible, por lo que las compañías se están planteando limitar las devoluciones gratis a ciertos productos, en cambios de talla o cuando el comprador se acerca a una tienda física a realizarla. Las marcas crearán nuevas estrategias de fidelización que primen la menor devolución de sus productos.
Según el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad, el 40% de los compradores devuelve algún producto, y eso ha llevado a algunas empresas a cobrar los portes por recoger los paquetes en casa del comprador. Inditex ya lo hace en 30 países. Amazon también en algunos supuestos.
Asimismo, dentro de la logística inversa también nos vamos a encontrar cada vez más con el reaprovechamiento de la mercancía devuelta, que en muchos sectores se devalúa, aunque no se haya utilizado, por lo que este 2023 asistiremos al auge de fórmulas de re-commercepara dotar de una segunda vida a estos artículos a través de su reacondicionamiento y soluciones de reciclaje que eviten el desecho incontrolado.
La automatización de las actividades en el almacén, el uso de los datos y blockchain, la llegada de la robótica para acelerar la operativa en la cadena de suministro o el uso de la Inteligencia Artificial para mejorar la trazabilidad son solo algunas de las aplicaciones de la tecnología en el sector, que gracias a ella podrá obtener beneficios como una mejora en la operatividad de los procesos o la reducción de costes. No en vano, la automatización de los procesos logísticos ayudará a potenciar la flexibilidad de las compañías, para que puedan ofrecer un mejor servicio a los clientes y hacer frente a flujos de mercancías y previsiones de demanda cada vez más impredecibles.
La innovación será esencial para la logística este 2023, por lo que las compañías deben apostar por ella cuanto antes para seguir siendo competitivas y poder atender a las crecientes necesidades de los clientes. Porque su impacto en las cadenas de suministro será total, ya que las convertirá en autónomas y les otorgará grandes niveles de optimización en aspectos como el almacenamiento y la entrega.
Esta nos permitirá, además, poder realizar una completa trazabilidad de cada pedido. Y no solo por la visibilidad del producto en movimiento, sino también para optimizar el inventario en el almacén. De esta forma, por ejemplo, los transportistas deberán tener la capacidad de reaccionar a los contratiempos casi en tiempo real y saber exactamente dónde se encuentra el inventario en cualquier momento.
Ya os lo hemos contado en alguna otra ocasión, uno de los principales retos de las cadenas de suministro de todos los sectores es la sostenibilidad, que está relacionada con una logística eficiente que promueva el diseño óptimo de rutas, de materiales respetuosos con el medioambiente y de procesos que disminuyan las emisiones. Por ejemplo, la última milla es una de las actividades más contaminantes y el desperdicio que generan los materiales de los productos y sus embalajes es cada vez mayor.
Por eso, según un estudio de la consultora TRUE Global Intelligence y Smurfit Kappa, los consumidores consideran que el packaging sostenible es un factor clave que influye a la hora de comprar moda online. Concretamente, el 51% de ellos indica que el uso de materiales de embalaje ecológicos juega un papel fundamental a la hora de adquirir ropa, calzado y accesorios. Una cifra que irá en aumento este 2023, donde la sostenibilidad será la norma.
Por eso las compañías logísticas deben apostar por procesos cada vez más eficientes y realizar prácticas sostenibles, ya no solo por mejorar su reputación de cara a clientes y consumidores, sino también porque son conscientes de la necesidad de que todos rememos en la misma dirección para revertir el cambio climático.
Personalizar la experiencia de usuario, personalizar cada producto, personalizar cada envío y su seguimiento, personalizar el servicio logístico que se presta a cada cliente. En definitiva, la personalización en su máxima expresión. Porque para las compañías es muy importante contar con la mejor operativa para incrementar la fidelidad de los consumidores, por lo que cada detalle cuenta.
Aspectos como el peso del paquete, su tamaño, cómo se envía o dónde se encuentra en cada momento el pedido deben estar disponibles en tiempo real tanto para comprador como para vendedor. Porque un seguimiento continuo y detallado tanto del envío como del servicio de almacenaje es esencial para poder ofrecer el mejor servicio de en la actualidad.
Por ejemplo, en Logisfashion cuentan con servicios de valor añadido como la personalización de artículos. En el caso de los productos textiles o de moda, disponen de la estampación de camisetas deportivas o los bordados de nombres o iniciales; para el sector de joyería, bisutería, bazar y hogar pueden grabar joyas con mensajes o iniciales; también graban cristalería (copas) y madera, entre otras opciones, para que los usuarios puedan llevarse a casa piezas únicas. “Además, sabemos cuál es la importancia del branding, por lo que elaboramos los pedidos de forma única y personalizada, realizamos el packing a medida de las necesidades de cada marca y cuidamos cada detalle, con operaciones especiales para artículos de lujo”, apuntan.
Comercio por voz o Voice commerce, Live Shooping, comercio visual, marketing social o metaverso son solo algunos de los conceptos que se harán un hueco cada vez mayor este 2023 y que la industria debe tener en cuenta para ser competitiva y adaptarse a los nuevos tiempos y consumidores.
Según SAP España, el comercio electrónico va a pasar a suponer la cuarta parte de las ventas totales en el mundo. Por eso, una mejor forma de profundizar la conexión con los consumidores es sumarse al carro de los nuevos modelos y oportunidades de venta que van surgiendo.
Entre ellos el auge de las plataformas sociales, que cada vez más se están convirtiendo también en métodos de pago. En datos, uno de cada tres consumidores en EE.UU. ya ha descubierto la viabilidad de comprar y pagar a través de las redes sociales, utilizando herramientas ya en el mercado como las que proporcionan Google, Apple, Amazon o Facebook Pay. De esta forma, las marcas pueden ampliar su alcance a grupos demográficos a los que de otra forma no llegarían, explorando también plataformas como Instagram y Tik Tok como canales de venta.
En definitiva, el mundo está cambiando a un ritmo vertiginoso, y la logística y el e-commerce no iban a quedarse atrás. Por eso, cada marca y compañía logística deben adaptarse rápidamente a cada cambio para poder ofrecer lo que pide el mercado y los consumidores en cada momento.