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Tu casa está pidiendo a gritos un lavado de cara total que llevas posponiendo una y otra vez, una mano de pintura que nunca llega o que cambies esa bombilla que desde hace unos días se ha fundido. Seguro que estas situaciones te suenan y que puedes resolver en la Gran Fiesta de la Casa que Leroy Merlin organiza hasta el próximo 10 de noviembre. Pero te apetece muy poco, no tienes tiempo y tampoco sabes por dónde empezar, por lo que decides que tampoco pasa nada por esperar algo más y optas por dejarlo para mañana, para dentro de un par de días o quizá para el próximo año. Es decir, procrastinar es lo tuyo.
Un estudio realizado por la firma de estudios de mercado Advanced para Leroy Merlin destaca que, de hecho, los españoles consideran que los demás se retrasan mucho más que uno mismo. Entre las tareas de bricolaje y mantenimiento del hogar, la que más pereza da es meterse en una reforma; le siguen pequeñas obras de albañilería, pintar y lijar. En cambio, apenas procrastinamos cambiando bombillas, montando un mueble y arreglando algún enchufe o interruptor.
Al igual que en otras regiones, en Galicia las tareas de bricolaje que más pereza dan son hacer una reforma, pintar y lijar y hacer obras de albañilería. Sin embargo, en estas tareas los gallegos se retrasan menos que otras regiones. Las dos tareas que menos pereza dan a los gallegos son cambiar una bombilla fundida y colgar un cuadro. De nuevo, en ambas tareas, los gallegos son mucho más diligentes que en cualquier otra región. Sin embargo, son más perezosos que el resto de España a la hora de arreglar un mueble roto y decorar, labores en las que los madrileños son los que menos procrastinan.
Las mujeres confiesan sentir más pereza que los hombres a la hora de realizar tareas de bricolaje y mantenimiento del hogar. Hacer reformas, obras de albañilería, pintar, lijar y en general hacer arreglos de cualquier tipo, no parecen ser actividades con las que ellas sueñen. La única actividad que las mujeres posponen menos que los hombres es la de decorar.
Pero lo que de verdad anima a los españoles a, como dice el refrán, no dejar para mañana lo que puedas hacer hoy, son la satisfacción de hacerlo uno mismo, el poder quitarse un peso de encima, así como el gusto por hacer dicho tarea y disfrutar con ella. A estas razones se añaden el afán de superación, las habilidades para hacer la tarea y el reconocimiento familiar.
Lo cierto es que la percepción que tenemos los españoles de nosotros mismos está muy asociada al retraso. La mayoría considera que solemos retrasarnos mucho o bastante. Sin embargo, la mayor parte de los españoles considera que nos retrasamos más o menos igual que los europeos.
Si hablamos de España, la cosa cambia. La percepción general del conjunto de los españoles acerca de quién procrastina más, ubica en el primer lugar del ranking a los andaluces, seguidos de los canarios. Según el estudio, navarros, aragoneses, cántabros y riojanos son quienes ocupan los últimos lugares en este ranking. En el sentir general de los españoles, quienes menos se retrasan en tareas de bricolaje y mantenimiento del hogar, son los vascos, muy por encima de catalanes, asturianos y madrileños.
Pero como casi todo en la vida tiene solución, las tres medidas que los españoles consideran más eficaces para reducir la procrastinación son: empezar el día planificando lo que se va a hacer, compartir la tarea y ponerse metas. A ellas se añaden otras como pedir a alguien que enseñe las tareas que no se saben hacer, priorizar lo importante y seleccionar tareas fáciles.