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El año 2018 estará marcado desde el punto de vista tecnológico por las posibilidades que han abierto los avances en inteligencia artificial, el auge de la analítica de datos y el aumento de los objetos conectados a Internet, así como por las nuevas capacidades de la robótica colaborativa y la proyección de los vehículos autónomos, según el centro tecnológico Eurecat, que destaca también que las tecnologías ómicas ya son una realidad para diseñar productos adaptados a cada perfil genético y pone de relieve la investigación en nuevos procesos en el campo de los materiales.
“Veremos robots más inteligentes, más rápidos, con más autonomía y, sobre todo, con nuevas habilidades”, en ámbitos diferentes al de la fabricación o el doméstico, como son la agricultura, la medicina, la seguridad o el transporte, explica la directora científica de Tecnologías Digitales del centro Tecnio, María Eugenia Fuenmayor. Por lo que se refiere al coche autónomo y a los drones inteligentes, 2018 “será el año en que empezaremos a verlos recorrer calles, en un caso, y volar en el espacio, en el otro, ya que se han aprobado y actualizado normativas de uso que lo permitirán”, apunta la investigadora.
Los avances en tecnologías digitales permitirán un incremento importante de objetos conectados, con un alto grado de inteligencia, operando en empresas, casas y espacios públicos, a causa del aumento de la velocidad de conexión, y los servicios se harán cada vez más personalizados y humanizados.
A causa del incremento de las aplicaciones del Internet de las Cosas, sobre todo en el sector del negocio online, el Big Data y la analítica de datos serán tecnologías clave, si bien deberán mejorar la rapidez y la precisión de los algoritmos de aprendizaje, así como el manejo de grandes volúmenes de información.
En paralelo, el nivel de seguridad que ofrece la tecnología del blockchain seguirá despertando un gran interés en las empresas que deben manejar y transmitir información sensible, entre las cuáles se encuentran el sector bancario y aquellos negocios que gestionan datos relativos a la privacidad de las personas, como es el caso de la salud.
En los próximos años, la investigación en tecnología de materiales se centrará en el desarrollo y la puesta a punto de nuevos procesos de elaboración y de transformación, así como en la investigación en materias primas con morfologías adecuadas a nuevos sistemas de fabricación. Un ejemplo de ello es la elaboración de polvo metálico esférico para su aplicación en procesos de fabricación 3D, así como en la proyección térmica de materiales para recubrimientos superficiales, un proceso que “puede conseguir superficies óptimas para alargar enormemente la vida de los componentes”, con aplicación en la reparación de piezas para la industria aeronáutica, detalla José Manuel Prado, del equipo de la Dirección Científica de Eurecat.
En el plano medioambiental, seguirá el creciente protagonismo de la economía circular, mediante la valorización de residuos industriales y la regeneración de suelos y aguas contaminadas.